ACEITE DE ARGÁN ALIMENTARIO

USO CULINARIO DEL ACEITE DE ARGÁN

Existen dos tipos de aceite de argán, el aceite artesanal, bereber hecho a mano con semillas tostadas, y el prensado en frío de manera mecánica, elaborado con semillas sin tostar.

El aceite elaborado con semillas tostadas es la variante más preciada en la llamada “nouvelle cuisine” por su extraordinario sabor afrutado a nuez, avellana y sésamo.

Para uso en cocina se recomienda, por su aroma y sabor, utilizar el aceite de argán hecho con las semillas o almendras de argán tostadas, pero podemos utilizar también el aceite cosmético, aunque sin apenas aroma y de sabor muy suave, éste conserva al 100% sus propiedades.

El aceite de argán elaborado artesanalmente con semillas tostadas es muy apreciado por sus propiedades organolépticas, sobre todo por el aroma y sabor a avellana y sésamo.

Debido a que el argán sólo se encuentra en una zona limitada del planeta, y que la elaboración del aceite es muy laboriosa, el aceite de argán se considera un aceite “raro” y muy preciado. 

El aceite de argán por su alto contenido en ácidos insaturados, su perfumado aroma, y su sabor inigualable es considerado de gran valor culinario y un buen sustituto del aceite de oliva. Debido a su alto contenido en grasas y estabilidad a altas temperaturas es también utilizado en frituras.

El aceite de argán de mayor calidad es el obtenido de semillas frescas.

El aceite de argán tiene mucho en común con el aceite de oliva pero es más estable y contiene mucha más vitamina E.

A diferencia del aceite de oliva, en el de aceite de argán, el nivel de ácido linoléico es superior, al igual que el de ácidos grasos esenciales, por lo que se recomienda su consumo para reducir la tasa de colesterol y prevenir dolencias cardiovasculares.

En Marruecos, las mujeres se pasan recetas medicinales y culinarias de madres a hijas. En la medicina tradicional de los bereberes existen preparados reconstituyentes y tonificantes hechos a base de aceite de argán. Estos preparados de fórmulas ancestrales los toman las personas convalecientes, los ancianos y los niños.

Las propiedades biológicas conocidas por las comunidades bereberes y utilizadas en la medicina tradicional han sido reconocidas científicamente lo que hace que el aceite de argán sea conocido internacionalmente. Uno de sus usos medicinales más reconocido es el de alimento cardio-saludable, capaz de reducir los niveles de colesterol (LDL) y regular de la tensión arterial. También es una alimento rico en vitamina E y tocoferoles, lo que hace que su ingesta nos proteja de los radicales libres. Consumir aceite de argán nos protege del riesgo de padecer tumores y de contraer diabetes. Las propiedades de los componentes del aceite de argán tienen efectos antiinflamatorios y analgésicos parecidos a los efectos de la aspirina.